Nagua.- La junta de vecinos de la comunidad El Arrollito del Limón de Samaná, de vieron en la obligación de trasladarse al municipio de Nagua a denunciar ante la procuraduría de Medio Ambiente contaminación sónica, ya que las autoridades de esa provincia no les hacen caso y se hacen de la vista gorda expresó Francisco Ramos presidente junta de vecinos de El Limón.
Ramos también explicó que esos negocios no apagan la música día y noche afectando la salud de niños y envejecientes, quiénes la mayoría están enfermos y esperan una respuesta de las autoridades antes de que ocurra una desgracia.